El 5 de diciembre salió el disco
póstumo de la cantante Amy Winehouse, se titula ‘Amy Winehouse- Lioness Hidden
Treasures’ que cuenta con 12 canciones, y en B- Side ya lo estuvimos
escuchando:
Las versiones originales de
‘Tears dry on their own’ y 'Wake up alone’ nos dan un indicio de que 'Back to
Black' podría haber sido un disco mucho mas jazzero, soul, a lo Etta James o
Ella Fitzgerald.
El álbum comienza con ‘Our day
will come’ y ‘Between The Cheats’, que continuan en la línea del 2do album de la
cantante. Podríamos decir que los coros recuerdan a aquellos grupos vocales de
los años `50, ’60…
‘Half time’ tiene algo de similitud con
baladas como ‘Take the box’ o ‘In my bed’ de su primer disco ‘Frank’. Bastante jazzero. Precioso tema, por cierto.
‘Best friends, right?’ sigue en
la línea del resto de temas, e indudablemente, en la línea rebelde de Amy
Winehouse, que comienza diciendo: ‘No puedo esperar a escaparme de vos, no es
sorpresa, vos odias eso de mi’.
‘Body and Soul’, la última
grabación de la cantante y el único dueto del disco, pero que cuenta por mil,
ya que Winehouse se une a nada más y nada menos que Tony Bennet. Una balada
compuesta en 1930, en la que Bennet y Winehouse se rienden a nosotros ‘Cuerpo y
alma’.
El álbum se cierra con ‘A song
for you’, el famoso tema de 1970, que también interpretaría de manera
formidable Christina Aguilera junto a Herbie Hancock hace un par de años. Tal
vez esta versión hace que la de la artista inglesa parezca escasear algo más de
fuerza, aunque nunca deja de estar presente la gran sinceridad con la que Amy
Winehouse interpretaba todas las canciones. Este tema termina con Amy hablando sobre lo
que acaba de grabar, como si se dirigiera a los que estañaban en el estudio con
ella. No vamos a negar que escucharla hablar al final de la canción nos puso un
poco la piel de gallina.
La verdad que no nos esperábamos
este álbum, pensábamos tendría un mayor toque reggae, y que no sería más que un
conjunto de requechos de diversas demos, pero, para nuestra alegría nos
sorprendió, si bien no es muy novedoso, ya que sigue en la línea de 'Back to
Black'.
Gracias al talento de la artista,
las intenciones de la discográfica, que le había rechazado a la cantante un
nuevo álbum por ser demasiado reggae (de ahí nuestras expectativas), de
aprovecharse morbosamente de los fans y de la propia Winehouse, no quedan tan a la expuestas.
Por último una recomendación
personal, el track número 7: ‘The girl from Ipanema’.